La melodía sugiere el vuelo aparentemente anárquico, continúo y repetido de una mosca bien grande, un moscardón cuyo zumbido se acerca y se aleja de nosotros sin poder escapar de él. La pieza cierra el Acto III justo después de que el cisne mágico le proporciona al hijo del Zar, el Príncipe Gvidon Saltanovich instrucciones de cómo transformarse en un insecto para poder volar y visitar a su padre, quien no sabe que él sigue vivo.
Esta pieza la hemos trabajado en algunas clases durante el trimestre y después en las videoclases durante el confinamiento.
Martín Vergara es el solista. Zorionak Martín!!!!